sábado, 30 de octubre de 2010

PREPARÁNDONOS PARA SER LÍDERES POSITIVOS

Destrezas y habilidades pproppias del líder ppara efectuar ppeticiones, ofertas, declaraciones y juicios.

liderazgo
Es el conjunto de capacidades que un individuo tiene para influir en un colectivo de personas, haciendo que este colectivo trabaje con entusiasmo en el logro de objetivos comunes. Se entiende como la capacidad de tomar la iniciativa, gestionar, convocar, promover, incentivar, motivar y evaluar a un grupo o equipo.

En la Administración de Empresas el liderazgo. 






Es el ejercicio de la actividad ejecutiva en un proyecto, de forma eficaz y eficiente, sea éste personal, gerencial o institucional (dentro del proceso administrativo de la organización).

Categorías y tipos de líder

Tipología de liderazgo y características


Clasificaciones más frecuentes:
Según la formalidad en su elección
  • Liderazgo formal: preestablecido por la organización.
  • Liderazgo informal: emergente en el grupo.
Según la relación entre el líder y sus seguidores
  • Liderazgo dictador: fuerza sus propias ideas en el grupo en lugar de permitirle a los demás integrantes a hacerse reponsables, permitiéndoles ser independientes. Es inflexible y le gusta ordenar. Destruye la creatividad de los demás.
  • Liderazgo democrático: el líder toma decisiones tras potenciar la discusión del grupo, agradeciendo las opiniones de sus seguidores. Los criterios de evaluación y las normas son explícitas y claras. Cuando hay que resolver un problema, el líder ofrece varias soluciones, entre las cuales el grupo tiene que elegir.
  • Liderazgo paternalista: tiene confianza por sus seguidores, toma la mayor parte de las decisiones entregando recompensas y castigos a la vez. Su labor consiste en que sus empleados trabajen más y mejor, incentivándolos, motivándolos e ilusionándolos a posibles premios si logran el objetivo.
  • Liderazgo liberal (laissez faire): el líder adopta un papel pasivo, abandona el poder en manos del grupo. En ningún momento juzga ni evalúa las aportaciones de los demás miembros del grupo. Los miembros del grupo gozan de total libertad, y cuentan con el apoyo del líder sólo si se lo solicitan.
Según el tipo de influencia del líder sobre sus subordinados
  • Liderazgo transaccional: los miembros del grupo reconocen al líder como autoridad y como líder. El líder proporciona los recursos considerados válidos para el grupo.
  • Liderazgo transformacional o carismático: el líder tiene la capacidad de modificar la escala de valores, las actitudes y las creencias de los seguidores. Las principales acciones de un líder carismático son: discrepancias con lo establecido y deseos de cambiarlo, propuesta de una nueva alternativa con capacidad de ilusionar y convencer a sus seguidores, y el uso de medios no convencionales e innovadores para conseguir el cambio y ser capaz de asumir riesgos personales.
  • Liderazgo autentico: es aquel líder que se concentra en liderarse en primer lugar a sí mismo. Es un líder con mucho autoconocimiento, ecuanime, espiritual, compasivo y generoso. Solo una vez que se lidera la propia mente se puede liderar a los demás.
  • Liderazgo lateral: se realiza entre personas del mismo rango dentro de una organización u organigrama o también se puede definir como el proceso de influir en las personas del mismo nivel organizacional para lograr objetivos en común con la organización.

  • Liderazgo en el trabajo: en los negocios se evalúan dos características importantes en los ejecutivos, con la intención de verificar su capacidad de dirección: por un lado, la aptitud y, por otro, la actitud. La primera se obtiene con el aprendizaje de nuevos métodos y procedimientos; por ejemplo, la capacidad de construir un balance, un flujo de caja, distribución de planta o un plan de marketing. Pero en muchos casos estos conocimientos no son aplicables, porque los gerentes carecen de una buena actitud, es decir, de un comportamiento adecuado que intente implementar dichos métodos. Entre las actitudes más solicitadas y requeridas está la habilidad de liderazgo, la misma que puede cultivarse pero que, según muchos autores, es parte de la personalidad individual. ¿Cómo saber si nosotros estamos configurados como líderes y, en caso contrario, cómo desarrollar estas habilidades en nuestra persona? Es un tema de amplio debate y estudio, pero es necesario descubrir si tenemos algo de líderes y qué cosas nos faltan para lograr serlo a cabalidad.

Evolución de los primates y homínidos fósiles al Homo sapiens.

Mitos sobre los orígenes

Artículo principal: Mitos de la creación
A lo largo de la historia se han ido desarrollando distintas concepciones míticas, religiosas, filosóficas y científicas respecto del ser humano, cada una con su propia explicación sobre el origen del hombre, trascendencia y misión en la vida.

[editar] De los simios del viejo mundo

Artículo principal: Catarrinos
Evolutivamente, en cuanto perteneciente al infraorden Catarrhini, el Homo sapiens parece tener su ancestro, junto con todos los primates catarrinos, en un período que va de los 50 a 33 millones de años antes del presente (AP), uno de los primeros catarrinos, quizás el primero, es el Propliopithecus, incluyendo al Aegyptopithecus, en este sentido, el ser humano actual, al igual que primates del "Viejo Mundo" con características más primitivas, probablemente descienda de esa antigua especie.

[editar] Homínidos bípedos

Artículo principal: Hominina
En cuanto a la bipedestación, ésta se observa en ciertos primates a partir del Mioceno. Ya se encuentran ejemplos de bipedación en el Oreopithecus bambolii y la bipedestación parece haber sido común en Orrorin y Ardipithecus. Las mutaciones que llevaron a la bipedación fueron exitosas porque dejaba libre las manos como para coger objetos y, particularmente, porque en la marcha un homínido ahorra mucha más energía andando sobre dos piernas que sobre cuatro patas, puede acarrear objetos durante la marcha y otear más lejos. Sin embargo, de remontarse la bipedestación a quizás a unos 6 millones de años aP, la andadura o forma de marcha típica del humano se consolida aproximadamente hace al menos unos 4 millones de años con el Australopithecus, previo a éstos los primates antropoides apoyaban toda la planta del pie haciendo una flexión y descargando el peso en el calcanio, en cambio el Australopithecus logra una marcha bípeda eficiente, pues se notan claramente los cambios anatómicos a nivel del pie, en especial del dedo gordo; también ajustando el ángulo del fémur con el cuerpo para el equilibrio, la cadera o pelvis cambia a más robusta, corta y cóncava (forma de cuenco); la columna pasó de ser un arco en forma de C a una forma de S y el agujero de la base del cráneo que conecta con la columna se desplazó hacia adelante[5] como dirigiéndose al centro de gravedad de la cabeza.
Hace 1,5 millones de años con el Homo erectus o con el Homo ergaster, la andadura moderna implica la existencia de un pequeño ángulo entre el dedo gordo y el eje del pie, así como la presencia del arco longitudinal de la planta y una distribución medial del peso (notar que en las mujeres la andadura distribuye el peso más hacia las partes internas del pie debido a la mayor anchura de la pelvis).[6]
Todos los cambios reseñados han sucedido en un periodo relativamente breve (aunque se mida en millones de años), esto explica la susceptibilidad de nuestra especie a afecciones en la columna vertebral y en la circulación sanguínea y linfática (por ejemplo, el corazón recibe -relativamente- "poca" sangre).

[editar] Aparece el hombre

Artículo principal: Homo
Lo que denominamos propiamente "humano", es una referencia a la aparición de la capacidad de fabricar herramientas de piedra en un homínido bípedo: el Homo habilis, considerado por la mayoría como la especie humana más primitiva, mostrando además incremento en la capacidad craneana con respecto a los Australopithecus. Es así como se establece que hace unos 2,5 millones de años, con la aparición del género Homo, se toma como punto de inicio para el Paleolítico o Edad de Piedra. Mayor éxito evolutivo tendrá el Homo erectus, quien logrará expandirse por todo Eurasia.
Véanse también: Prehistoria y Paleolítico inferior

[editar] Evolución de la nutrición

Probablemente cuando los ancestros del Homo sapiens vivían en selvas comiendo frutos, bayas y hojas, abundantes en vitamina C, pudieron perder la capacidad metabólica, que tiene la mayoría de los animales, de sintetizar en su propio organismo tal vitamina; ya antes parecen haber perdido la capacidad de digerir la celulosa. Tales pérdidas durante la evolución han implicado sutiles pero importantes determinaciones: cuando las selvas originales se redujeron o, por crecimiento demográfico, resultaron superpobladas, los primitivos homínidos (y luego los humanos) se vieron forzados a recorrer importantes distancias, migrar, para obtener nuevas fuentes de nutrientes, la pérdida de la capacidad de metabolizar ciertos nutrientes como la vitamina C habría sido compensada por una mutación favorable que permite al Homo sapiens una metabolización óptima (ausente en primates) del almidón y así una rápida y "barata" obtención de energía, particularmente útil para el cerebro. El Homo sapiens parece ser una criatura bastante indefensa y como respuesta satisfactoria la única solución evolutiva que ha tenido es su complejísimo sistema nervioso central. Espoleado principalmente por la busca de nuevas fuentes de alimentación. Se ha observado que la cefalización aumentó paralelamente al incremento de consumo de carne. La habilidad humana para digerir alimentos con alto contenido de almidón como las papas, podría explicar el éxito del homo sapiens en el planeta, sugiere un estudio genético.[7]

[editar] Homo sapiens arcaico

Hombre de Qafzeh (anatómicamente moderno).
Se denomina "humanos arcaicos", "Homo sapiens arcaico" o también "pre-sapiens", a un cierto número de variedades de Homo que aún no son considerados anatómicamente modernos. Poseen hasta 600.000 años de antigüedad y tienen un tamaño cerebral cercano al de los humanos modernos. El antropólogo Robin Dunbar opina que es en esta etapa en la cual aparece el lenguaje humano. La filiación de estos individuos dentro de nuestro género es aún controversial.
Entre los humanos arcaicos están considerados Homo heidelbergensis, Homo rhodesiensis, Homo neanderthalensis y a veces Homo antecessor. Ya que no son sapiens, algunos especialistas prefieren llamarlos simplemente arcaicos antes que H. sapiens arcaico.[8]

[editar] Humanos anatómicamente modernos

Se denominan propiamente Homo sapiens o anatómicamente modernos a individuos con una apariencia similar a la de los humanos modernos. Estos humanos pueden clasificarse como premodernos, pues en ellos no se observa todavía el conjunto de características de un cráneo moderno, casi esférico, con la bóveda alta y la frente vertical.[9] La similitud se aprecia a nivel del esqueleto del cuerpo y cavidad craneana, pero esta similitud no es total pues el rostro aún mantiene características arcaicas como los arcos superciliares (grandes cejas) y prognatismo maxilar (proyección bucal), aunque menos desarrollados que en los neandertales.[10]
Se consideran dentro de este grupo a los restos de Florisbad en Sudáfrica (260.000 años),[11] los de Herto en Etiopía que corresponde al Homo sapiens idaltu (160.000 años), los de Jebel Irhoud en Marruecos (160.000 años) y los de Skhul y Qafzeh al Norte de Israel (100.000 años). También se consideran anatómicamente modernos a los Hombres de Kibish, sin embargo estos se enmarcan mejor dentro de los humanos modernos.

[editar] Los humanos modernos

Artículo principal: Origen de los humanos modernos
Se consideran Homo sapiens sapiens de forma indiscutible a los que poseen las características principales que definen a los humanos modernos: Primero la equiparidad anatómica con las poblaciones humanas actuales y luego lo que se define como "comportamiento moderno".
Los restos más antiguos son los de Omo I llamados Hombres de Kibish, encontrados en Etiopía con 195.000 años, y restos en cuevas del río Klasies en Sudáfrica con 125.000 años y con indicios de una conducta más moderna.[12] Esta antigüedad coincide con lo estimado para la Eva mitocondrial, la cual está considerada la antecesora de todos los seres humanos actuales y de la que se cree que vivió en el África Oriental[13] (probablemente Tanzania) hace unos 200.000 años. Por otra parte, la línea patrilineal que nos lleva hasta el Adán cromosómico, nos confirma un origen para los humanos modernos en el África subsahariana.

[editar] Pigmentación

Es casi seguro que la Eva mitocondrial y el Adán, los primeros Homo sapiens eran melanodérmicos, esto es: de tez oscura. Esto se debe a que la piel oscura es una excelente adaptación a la exposición solar alta de las zonas intertropicales del planeta Tierra; la tez oscura (por la melanina) protege de las radiaciones UV (ultravioletas), y obtiene de ellas por metabolismo un nutriente llamado folato indispensable para el desarrollo del embrión y del feto, empero, a medida que las poblaciones humanas migraron a latitudes más allá de los 45º (tanto Norte como Sur) la melanina paulatinamente ha sido menos necesaria, más aún, en las cercanías de las latitudes de los 50º la casi total falta de este pigmento en la dermis, cabello y ojos ha sido una adaptación para captar más radiaciones U.V. -relativamente escasas en tales latitudes; salvo que se produzcan huecos de ozono-, en tales latitudes la tez muy clara posibilita una mayor metabolización de vitamina D a partir de las radiaciones UV.

[editar] Comportamiento moderno

La aparición del comportamiento humano moderno significó el más importante cambio en la evolución de la mente humana, dando lugar a que el ingenio creativo humano le llevaría a dominar su entorno paulatinamente. Una revolución humana que nos hizo como somos hoy.
Las innovaciones que fueron apareciendo consisten en una gran diversidad de herramientas de piedra, en el uso de hueso, asta y marfil, en entierros con bienes funerarios y rituales, construcción de viviendas, diseño de las fogatas, evidencia de pesca, cacería compleja, aparición del arte figurativo y el uso de adornos personales.[14]
Las evidencias más antiguas se encuentran en África. Restos de puntas de flechas y herramientas de hueso para pescar se encontraron en el Congo y tienen 90.000 años. Igualmente antiguos son unos símbolos sombreados con ocre rojo en costas al Sur de África.[15]
Véase también: Paleolítico superior

[editar] Expansión de la humanidad

Según la Teoría fuera de África, hubo una gran migración de África hacia Eurasia hace 70.000 años que produjo la paulatina dispersión por todos los continentes. Según los estudios genéticos actuales, se estima que en pocos miles de años hubo una migración costera por el Sur de Asia que posibilitó la colonización temprana de Australia.
En Occidente hubo un centro de expansión en el Medio Oriente que está relacionado con el Hombre de Cromañón y la población temprana de Europa; probable causa de la extinción del Hombre de Neandertal.
En Oriente la población es igualmente antigua. El pliegue epicántico de los párpados existente en gran parte de las poblaciones del Asia y de América, el pliegue que hace 'bridados' en su aspecto externo a los ojos, ha sido una especialización de poblaciones que durante las glaciaciones debieron pervivir en lugares con abundancia de nieve: los ojos vulgarmente llamados "rasgados" entonces fueron el modo de adaptación para que los ojos no padecieran un excesivo reflejo de la luz solar reflejada por la nieve.

Origen y evolución del planeta tierra



El origen de La Tierra es el mismo que el del Sistema Solar. Lo que terminaría siendo el Sistema Solar inicialmente existió como una extensa mezcla de nubes de gas, rocas y polvo en rotación. Estaba compuesta por hidrógeno y helio surgidos en el Big Bang, así como por elementos más pesados producidos por supernovas. Hace unos 4.600 Ma, una estrella cercana se transformó en supernova y su explosión envió una onda de choque hasta la nebulosa protosolar incrementando su momento angular. A medida que la nebulosa empezó a incrementar su rotación, gravedad e inercia, se aplanó conformando un disco protoplanetario (orientado perpendicularmente al eje de rotación). La mayor parte de la masa se acumuló en su centro y empezó a calentarse, pero debido a las pequeñas perturbaciones del momento angular y a las colisiones de los numerosos escombros generados, empezaron a formarse protoplanetas. Aumentó su velocidad de giro y gravedad, originándose una enorme energía cinética en el centro. La imposibilidad de transmitir esta energía a cualquier otro proceso hizo que el centro del disco aumentara su temperatura. Por último, comenzó la fusión nuclear: de hidrógeno a helio, y al final, después de su contracción, se transformó en una estrella T Tauri: el Sol. La gravedad producida por la condensación de la materia –que previamente había sido capturada por la gravedad propio Sol–, hizo que las partículas de polvo y el resto del disco protoplanetario empezaran a segmentarse en anillos. Los fragmentos más grandes colisionaron con otros, conformando otros de mayor tamaño que al final formarían los protoplanetas.[3] Dentro de este grupo había uno situado aproximadamente a 150 millones de km del centro: la Tierra. El viento solar de la recién formada estrella arrastró la mayoría del las partículas que tenía el disco, condensándolas en cuerpos mayores.